Se trata de un sistema de tabiquería desmontable, no móvil, formado por una estructura de perfiles metálicos sobre la cual se atornillan a ambos lados las placas de cartón-yeso (tipo Pladur®), creando una cámara de aire, por lo general rellena de lanas o fibras minerales, que los convierten en tabiques adecuados tanto en construcciones nuevas, reformas y acondicionamiento.
Una característica importante es el aislamiento térmico y acústico que este sistema proporciona. La placa aporta un acabado agradable al tacto, un liso perfecto y es resistente al fuego. Permite acabados en pintura, papel, barniz e incluso alicatado. Existen varios espesores y tipos de placas; en el interior de esta estructura se pueden intercalar las canalizaciones de fontanería y electricidad.